En España no contamos con una amplia red de fábricas de circuitos impresos, y esto es debido a que este sector consta de unas barreras de entradas bastante fuertes además de suponer una gran inversión inicial para adentrarse en este mercado. Cuando hablamos de que la inversión inicial para una fábrica de circuitos impresos es elevada debemos tener en cuenta diversos factores para comprenderlo, por ejemplo, este tipo de fábricas de circuitos impresos se deben situar por estatutos reglamentarios a las afueras de la ciudad, es decir, en polígonos industriales, y el simple hecho de comprar o bien un terreno o bien una nave industrial para situar ahí la fábrica de circuitos impresos ya supone un desembolso bastante alto, como ya sabemos hoy en día todos los terrenos industriales cotizan a un precio poco asequible en el mercado, debido a su cercanía con las grandes ciudades y los grandes proveedores, entre otras cosas.
Una producción importante para aparatos electrónicos
Las fábricas de circuitos impresos se dedican principalmente al diseño, fabricación y distribución de placas PCB. Que para aquellos que desconozcan de su existencia, son las placas electrónicas que hacen posible el funcionamiento de cualquier dispositivo electrónico o tecnológico, es por ello que es un mercado con bastante demanda constante y con una oferta un poco reducida, por lo que está considerado un oligopolio con fuertes barreras de entrada, como mencionábamos anteriormente.
Respecto al mercado internacional de la distribución de este tipo de circuitos impresos, las empresas españolas se encuentran en una fase de expansión continúa desde hace unos años, aunque debemos mencionar que está siendo un proceso paulatino debido a las dificultades legales de la instauración de este tipo de fábricas de circuitos impresos en otros países, pero aun así poco a poco estas empresas españolas están consolidando una red clientelar bastante fiel que les está permitiendo invertir en I+D+I para conseguir nuevos avances y disminuir los altos costes de producción.